LECTURAS:
Eclesiastés 1, 2; 2,21-23. Salmo: 89 “Señor Tú has sido nuestro refugio de
generación en generación”. Colosenses, 3, 1-5. 9-11- Evangelio de San Lucas,
12, 13-21.
La reflexión crítica que nos presenta el libro del Eclesiastés nos puede venir bien en cualquier momento… La avaricia es una tentación que asalta al ser humano en toda época; también a nosotros en la situación actual, nos impide valorar lo que somos, entrar dentro de nosotros mismos y encontrarnos con nuestra realidad…al fin de cuentas con la mano de Dios que nos sostiene… y solo buscamos acaparar, acumular, tener más, solo pensamos en lo de fuera, las cosas, el tener… nos olvidamos de los demás, del valor de cada persona; solo el ostentar y poseer nos obsesiona. Una persona avariciosa no vive más que para sí y por tanto termina en sí.
Jesús aprovecha la
parábola para advertirnos del peligro de poner toda nuestra confianza y
esfuerzos en los bienes terrenales. Parábola realista y que por ello mismo no
nos resulta tan agradable. Jesús hace intervenir al propio Dios, con lo cual
nos hace pensar y ser críticos, desde la condición de cristianos, con nuestro
propio modo de entender la vida: “Necio, esta noche te van a exigir la vida. Lo
que has acumulado, ¿de quién será?”
Que el Señor nos ayude a pasar un buen domingo en familia, con amigos, allí donde se desarrolle nuestra vida siempre en paz y alegría.
NOTA: Desde aquí os invito (con
tiempo) para celebrar el 86 aniversario del Martirio del Beato Manuel Aranda,
día 8 de agosto. Cada cual encomiéndese a él… pida su protección… recuerde su
ejemplo y, si puede, se alegraría mucho de participar en la Fiesta que en Monte
Lope Álvarez tendremos, dicho 8 de agosto: 7,30 de la tarde reunión en la
Parroquia (oración) salida hacia la CRUZ y a las 8,00 celebración de la Misa
(entre olivares) donde dio su testimonio Manuel, nuestro Seminarista Mártir.
Finalizada la Misa vuelta a la Parroquia procesionalmente con el cuadro de la
imagen de MANUEL.
Antonio Aranda Calvo. Sacerdote.
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