PRESENTACIÓN:
Comenzamos la Novena a Ntro. P. Jesús, en el año de Gracia de 2023. Os invito a que
esta NOVENA sea un ENCUENTRO CON JESÚS, NUESTRO PADRE JESÚS, EL ABUELO.
Los días de Cuaresma que llevamos, están siendo ocasión para que entremos en el
Misterio de Cristo: pensemos, por ejemplo, en la presentación del Cartel y
Boletín, el Pregón de Nuestra Cofradía, el Besapié a Jesús, Besamanos a la
Virgen, presentación de niños a las imágenes titulares y desde ellas a Dios,
los Vía Crucis, las celebraciones del Domingo y demás actos litúrgicos… todo
ello y nuestra devoción particular están ayudando a nuestro ENCUENTRO CON
JESÚS, encuentro de corazón a corazón. Pues bien, vamos a dar un paso más con
estos nueve días, que pueden ser como unos ejercicios de vida cristiana: Las
puertas del Templo, abiertas durante
estos días, para que las imágenes en el Altar Mayor puedan ser contempladas y
quienes pasen puedan acercarnos fácilmente
a ellas. Sacerdotes dispuestos para escuchar vuestras confesiones, reflexionar
y ayudar; ejercicio del Santo Rosario, Santa Misa, Predicación, cantos,
ejercicio de Novena, todo ello para ENCONTRARNOS CON JESÚS. Hace unas semanas
me invitó el Hermano Mayor y la Junta Directiva a predicar la Novena, gracias,
pero poco puedo aportar, que llevo ya
para 14 años, desde que se abrió este Templo, Camarín de Jesús, elevado a
SANTUARIO LOCAL DE Ntro. P. Jesús Nazareno por el Sr. Obispo Don Ramón del
Hoyo. Nada nuevo, estilo, enseñanzas o doctrina puedo aportar, después de esos
14 años predicando todos los días, domingos y fiestas. Antes hice esta Novena,
cuando Jesús estaba en la Catedral, después aquí, dos años el Triduo a la
Virgen de los Dolores. No quisiera provocar tampoco cansancio o decepción, os
pido hagamos juntos la Novena eso, como si fuera un ENCUENTRO DE CORAZÓN A
CORAZÓN y desde aquí quien es, qué nos
dice, que hizo por nosotros Nuestro Señor Jesucristo, Hijo de Dios, nacido de
María su Madre y que tuvo por tutor a San José.
Vamos entre todos a hacer la Novena.
NOVENA
17 de marzo. Primer Día: ENCUENTRO CON JESÚS. ¡Señor Jesús! quiero encontrarme contigo
en estos días de Novena: un encuentro de corazón a corazón; Jesús, te abro mi
corazón para que puedas entrar en él y así yo entraré en el tuyo, que lo tienes
abierto para mí, de par en par. Quiero mirarte y contemplarte; no saber más que
de Ti… Quiero en este encuentro abrazarte, darte gracias, decirte de mi amor,
pues que yo te amo y Tú me amas en tal modo que no sabría vivir sin Ti… Apenas
expreso este sentimiento veo y siento que Tú vienes hacia mí, que ya tomaste la
iniciativa, amándome hasta dar la vida por todos y por cada uno de nosotros.
Porque Tú Jesús eres Amor y no podemos echarnos delante de Ti. Gracias que me
estás esperando con el corazón abierto y los brazos abiertos para meterme
dentro de ti.
Al encontrarme contigo, en el primer
día de Novena, de este 2023, veo tus ojos doloridos que me miran, tus manos que
se abrazan a la Cruz, tu cuerpo inclinado hacia mí, que me invita a seguirte,
caminando por los senderos de la vida, luchando para ser mejor y aportando a
nuestra sociedad la fuerza de tu Corazón en el cual quieres que descansemos. Tú
nos has dicho: “Venid a Mi todos los que estáis cansados y agobiados y Yo os
aliviaré”. Jesús, sencillo y humilde de corazón, grande para amar, grande para perdonar, grande en misericordia
y bondad, haz mi corazón semejante al Tuyo, para ello dame in corazón limpio,
limpio como el cristal, dame un corazón dulce, un corazón dulce como la miel,
en fin dame un corazón como el tuyo, Señor Jesús. Ojalá, que al contemplarte en
estos días te podamos imitar y amar más,
con toda nuestra alma, con la vida entera y el corazón encendido.
Recordamos lo que El Señor nos ha
dicho en el Evangelio respondiendo sobre la pregunta del escriba acerca del
primero y principal mandamiento “Escucha, el Señor nuestro Dios es el único
Señor: Amarás al Señor, tu Dios con todo el
corazón, con toda tu alma, con toda tu mente, con todo tu ser.
El segundo es: amarás a tu prójimo
como a ti mismo”. No hay mandamiento mayor que estos. En esta Novena queremos
encontrarnos contigo, Jesús, para cumplir ese mandato; “Dios y los hermanos”,
pues Dios al hacerse hombre en Cristo Jesús se ha hecho uno como nosotros y lo
encontramos a través de la bendita Imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, que
nos dejaron nuestros mayores, que por siglos ha sido venerada entre nosotros
con inmenso amor. Imagen, cuya salida despierta el amanecer del viernes santo,
la oscuridad de la noche, alumbrada por Nuestro Jesús da paso a la luz del día para
llamarse siempre y exclusivamente madrugada de Jesús.
ENCUENTRO contigo Jesús, con tu Imagen
del Abuelo, que es distintivo de nuestra Ciudad y de tantos giennenses
repartidos por toda España y por el mundo entero. En esa Imagen, que en estos
días se contempla espléndida en el centro del Altar Mayor de tu Iglesia
Santuario, te contemplamos a Ti Verdadero Señor Jesús, preciosa Imagen que
magníficamente te representa. Porque Tú, Señor Jesús, Tú eres el Hijo de Dios
verdadero, quien hecho hombre en el seno de la Virgen, la humilde doncella de
Nazaret, compartió con nosotros la realidad humana, hasta la muerte,
resucitando para darnos la vida. Jaén te venera y reconoce como su Señor y
Maestro, como su Padre y Protector; en un arrebato de ternura te llamó y te
sigue aclamando querido y amante ABUELO.
Encuentro contigo, señor Jesús desde
lo hondo del corazón. Bien sabes que muchos venimos a visitarte cada día,
hombres y mujeres, ancianos y jóvenes, padre y madres con sus hijos de la mano,
abuelos que traen a los nietos, jóvenes matrimonios, quienes ya han engendrado
su primero o segundo hijo, y todavía en el vientre, vienen a ofrecértelo,
parejas de chicos y chicas que esperan llevar su vida en común, viene a pedirte
luz en su caminar. Y me enternece ver a personas mayores y menos, muchos,
limitados por algún accidente, enfermedad o por los años que son traídos ante
Jesús, derraman algunas lágrimas de amor y nostalgia pero vuelven felices
porque ya han visto a N. P. Jesús. Y vuelven a Santa Isabel, al Polígono del
Valle, a la zona de la Universidad y a las expansiones, cada vez más alejadas
del Centro Tradicional.
En nuestras visitas te miramos, te
decimos, te escuchamos… y Tú nos dices sobre todo “te quiero” y a cada uno/a
nos hablas de lo que más necesitamos para la paz del corazón y lo haces con
cariño indecible; a través de la bendita Imagen que nos preside, nos das
esperanza en la difícil vida que atravesamos; nos das alegría para seguir
caminando, nos consuelas ante los desgarros del corazón. A Ti, Señor Jesús, mi Señor y
Salvador, acudo para reconocerte, para darte Gracias, para pedirte luz en la
vida, para que intercedas ante los problemas que me afectan o en favor de las
personas queridas que sufren la enfermedad o los contratiempos que día a día
nos presenta una sociedad tan dificultosa como la nuestra. A Ti te pido por nuestras
familias, los padres, los hijos, los más pequeños, los ancianos, nuestros
hogares. Te pido por nuestra Ciudad de Jaén que te tiene como faro y guía, te
pido por nuestra Diócesis, nuestra Iglesia de Jaén, su Obispo, los Sacerdotes,
las Cofradías. Te pido por el mundo entero, donde todavía se dan las guerras y
los enfrentamientos, donde se vive el hambre y las injusticias. ¡Ayúdanos,
Jesús Nazareno! ¡Cuida de nuestro mundo! Tú lo creaste, en un orden perfecto,
para que en él gozáramos todos los seres vivos, hiciste al hombre el máximo
responsable y vemos cómo nos convertimos en los mayores depredadores, contra el
mundo animal y vegetal, contra el agua, la limpieza de la atmósfera, los
tesoros de la tierra. Ayúdanos a poner nuestro empeño en el equilibrio de la naturaleza,
en el amor y respeto a la vida. Que los seres humanos se entiendan, los países
vivan en paz, la naturaleza entera pueda cantar tu gloria, Señor: “Mares y
ríos, aguas del espacio, cielos y tierra, lluvia y rocío, luz y tinieblas,
fuego y calor, montes y cumbres, pájaros y todas las aves del cielo. Todo
cuanto existe alabad al Señor!”. Tú
deseas para nuestra sociedad, que seamos una familia hermanada, solidaria,
equilibrada y justa, por ello ¡danos un corazón nuevo, infunde en nosotros un
espíritu nuevo!
“Encuentro con Jesús Nuestro Padre Jesús Nazareno”
¿Qué
encuentras en mí, Señor, Amigo
Que
me buscas y me buscas cada día
Y
cuanto más estoy, en lejanía
Más
te acercas y más porfías?
Es
tu amor gratuito y sin medida
Que
me inunda
Saltando
por los diques y compuertas,
Que
insensible y ruín
Opongo
a tu gracia inmensa.
¿Pero
cómo aún mantienes tu llamada, cómo aún de mí te fías?
Tu
Palabra eterna por los siglos,
Y
esta Sagrada Imagen que nos mira
Te
dejó prisionero en nuestra tierra
Y
seguirás llamando ¡cuántas veces!
Esperando
por siempre la respuesta
Antonio
Aranda Calvo, sacerdote